Cómo usar tu prima de mitad de año para invertir en bienes raíces

La prima de mitad de año, equivalente a 15 días de salario, puede convertirse en una palanca decisiva para materializar el sueño de la casa propia o fortalecer tu patrimonio inmobiliario. Entre las ventajas más destacadas se encuentran:

Reducción del monto financiado: aportar esa suma a la cuota inicial disminuye el saldo del crédito hipotecario, permitiéndote acceder a tasas más bajas, cuotas mensuales manejables y menor tiempo de deuda

Ahorro disciplinado y meta clara: destinar la prima a un fondo específico fomenta el hábito del ahorro, mantiene el enfoque en la meta de adquisición y evita gastos impulsivos.

Condiciones favorables del mercado: con la inflación en descenso y las tasas de crédito reducidas, el contexto macroeconómico actual favorece la inversión inmobiliaria.

Impulso al momento decisivo: junio marca un pico en la intención de compra de vivienda en zonas urbanas como Bogotá, Medellín y Cali, y tu prima puede ser el empujón definitivo para reservar un inmueble.

Pasos recomendados

1. Abre una cuenta de “vivienda”: aísla el dinero para no usarlo con otros fines.
2. Establece tu presupuesto y meta: elige el tipo de vivienda (nueva, usada, alquiler con opción a compra) y la zona según tus posibilidades .
3. Consulta el mercado y financiación: compara opciones, tasas y plazos en diversos bancos; infórmate sobre costos adicionales (escrituras, impuestos, seguros). 
4. Verifica la propiedad: solicita certificado de tradición, estudia subsidios disponibles y procesa la promesa de compraventa con respaldo legal

En resumen

Invertir la prima de mitad de año en proyectos inmobiliarios no solo reduce la carga crediticia de tu futura vivienda, sino que también marca una disciplina financiera orientada a objetivos concretos. Con tasas a la baja y un mercado dinámico, este ingreso adicional puede ser el punto de partida para construir patrimonio y acceder a mejores condiciones de financiamiento.